FONOAUDIOLOGÍA

Este grupo de especialistas es el encargado de enseñar a los niños con fisuras de labio y/o paladar a emitir su voz en forma correcta, es decir, que ellos enseñan a los niños a hablar.

Los niños que nacen con fisura labio palatina tienden a respirar por la boca y hablar por la nariz, es decir, hacen lo inverso a todos. Por eso es importante que el contacto con los Fonoaudiólogos se haga durante los primeros meses de vida, integrándose a un programa de estimulación del lenguaje creado por la unidad de Fonoaudiología de Fundación Gantz.

Para hacer más fácil entender la función de este programa, lo resumimos así:

0 – 3 años: programa de estimulación del lenguaje, con participación completa y total de los padres.

3 – 6 años: inicio y término del tratamiento del habla.

Para lograr el éxito total, al finalizar este tratamiento debemos ser constantes, ya que los bebés no pueden ir solos a sus citaciones y desconocen la importancia que estas clases tienen para aprender a expresarse cuando deban ingresar a un jardín o al colegio.

Es fundamental que en los hogares de los pacientes se complemente la tarea de los fonoaudiólogos: teniendo una buena comunicación con los niños, expresándose con términos o palabras correctas, conversando sobre las actividades vividas en el día o leyéndoles algún cuento.

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